El software Habanero nos lleva de viaje a Hong Kong con su máquina tragaperras de 5 rodillos y 3 filas Fortune Dogs™, bajo la temática de los animales y en particular de los perros. ¡Un juego de casino sin descarga que nos ofrece líneas de pago horizontales y que se permite ofrecernos 4 Jackpots: un mini que dará 200x la apuesta, Minor llega hasta 600x la apuesta, Mayor nos dará hasta 2000x la apuesta y Grand nos dará hasta 10.000 veces la apuesta!
Pearl, una caniche blanca muy mimada, se va de viaje con su dueña Lucy, a Hong Kong por negocios. Como está muy ocupada, pide un servicio de niñera para su pequeño tesoro. Lucy no tiene hijos, sólo su perrito que lo es todo para ella. Desde la recepción del hotel le envían a Cailing, una joven que no es demasiado responsable pero que quiere ganarse algo de dinero de bolsillo.
Cailing es la sobrina de la recepcionista y como tiene que hacer un favor a su tía acepta. No es normal pedir una niñera para un perro en un hotel, pero como es una huésped VIP, recibe toda la atención. Es cierto que a Cailing le encantan los perros, pero es muy despistada. Se hacen las presentaciones y Lucy tiene que salir corriendo a una reunión.
Pearl mira a Cailing con cara divertida, ¡pero no tiene muchas opciones! ¡Cailing se ofrece a acicalar y vestir a Pearl! Después de una hora, por fin ha terminado, y ahí está nuestra Perla con un lazo rosa en lo alto de la cabeza y un collar de perlas a juego como se ve en Fortune Dogs™. ¡Es tan linda! ¡Ahí está la amiga de Cailing llamándola por el móvil!
Alguien llama a la puerta y trae un paquete para Lucy, y aprovechando que Cailing está ocupada con el teléfono y firmando el recibo del paquete, Pearl ve la puerta abierta y ¡bam! ¡Sale! Está un poco aburrida con la conversación de su niñera con su novia. Corre, corre por todo el pasillo, y de repente ve a otro perro corriendo... ¿Quién es este precioso chihuahua que también corre?
Ella le llama y le pregunta a dónde va con su bonita pajarita. Le dice que se ha escapado a dar un paseo por la ciudad, está acostumbrado, ¡lo hace de vez en cuando! La rutina no le sienta nada bien y la señora de la limpieza le deja la puerta abierta para que salga a pasear. Yun Yie, así se llama, le va a enseñar Hong Kong, será su guía. Va a ser divertido. ¡Vamos a por una nueva aventura!
Yun Yie conoce la salida del hotel y escapa sin que nadie lo vea. Pearl está asombrada, ¡nunca hubiera pensado que una pequeña caniche de una buena familia como ella se escaparía con un chihuahua chino! La va a llevar a ver a su compañero de chow-chow Shin Lou, y les va a preparar un pequeño refrigerio, ¡tiene un bonito restaurante en la calle principal de Hong Kong! Les ha tocado el turno a ellos. Pero eso sin contar con la presencia de Xiao Ming, el bulldog del juego Fortune Dogs™: con su banda de matones.
Se plantan delante de ellos y les bloquean el paso. ¡Perla y Yun Yie empiezan a temblar! ¡No quieren meterse con ese perro! Los rodean para asustarlos aún más y les piden el collar de Pearl, ¡ellos saben distinguir uno bueno de uno malo! ¡Y con eso podrían cambiarlo en el mercado negro por un montón de huesos! Pero detrás de ellos aparece Yi Feng, el detective de la policía, y su patrulla.
Llevan quince días siguiéndolos sin descanso, ¡hay que pillarlos in fraganti para darles una lección! Y este momento acaba de llegar... Los arrestan y pueden encerrar a Xiao Ming y sus matones durante mucho tiempo, ¡Yi Feng estaba muy contento consigo mismo y con su equipo! ¡Uf! Se han salvado.
Yi Feng, Yun Yie y Shin Lou son los mejores amigos, y el primero se ofrece a acompañar al segundo y a Pearl al tercero. Cuando llegan al restaurante de Shin Lou, Yun Yie, el chihuahua con pajarita, le cuenta toda la historia. ¡Qué aventura! Shin Lou, el Yorkie con sombrero chino, decide llevarles unos fideos que también están presentes en la máquina tragaperras móvil Fortune Dogs™.
Después de haber comido bien y haber reído hasta las lágrimas, los amigos deciden volver y por seguridad, Yi Feng también va con ellos, ¡no quiere más malas sorpresas por ahora! Llegan al hotel por el mismo camino que habían tomado y se despiden en la puerta. ¿Te puedes creer que la niñera seguía al teléfono con la puerta abierta y no se había dado cuenta de que Pearl había salido a pasear? ¡Esa chica es demasiado! Pero Pearl estaba muy contenta de haber hecho nuevos amigos, ¡incluso tuvieron una cita al día siguiente!